Abro los ojos miro a un lado y otro, solo oscuridad, ¿que hora es? ¿donde estoy? vuelvo a cerrarlos y pienso, pienso en como está mi vida, que es lo último que hice ayer antes de acostarme, lo último que dije, lo último que pensé ...... lo último que soñé.
De un salto me pongo de pié y me dirijo a la ventana, subo la persiana lentamente como si pesara una tonelada, no deseo descubrir el nuevo día con prisas, deseo disfrutarlo, y pensar que seré capaz de hacer hoy..... un día maravilloso, cálido, transparente, azul y luminoso. Lo fotografío y lo comparto en twitter, técnica que voy a ir eludiendo, no creo que sea una buena compañía; para algunas cosas si, porque conoces a muchas personas, pero para confiar, no, pues se suele hacer alarde de facultades ficticias en la mayoría de los casos.
Preparo mi desayuno habitual, zumo de naranja recién exprimido y café con leche templada, todo está en silencio, deseo hacer cosas me dirijo al despacho enciendo el mac y me situo delante del blog, pienso ... a ver que pasa, esperaré unos minutos y comenzaré a escribir.
Y aquí estoy, tratando de transmitiros lo que pasa por mi mente.
He podido comprobar que repetimos sin cesar una y otra vez, que la vida es maravillosa, sin saber realmente el porque es tan maravillosa, hablamos de los hijos, por ejemplo, ¿es maravilloso tener hijos?, ¿comprarlos?, o ¿que te los fabriquen en un laboratorio? hijos a la carta se denomina ahora, ¿verdad? ¿es eso lo que es tan maravilloso? o hablemos del método tradicional, engendramos un hijo, le preparamos una habitación, compramos un coche, llenamos la casa de pañales y hacemos que toda la familia se hipoteque para darle a esa criatura lo que desean sus padres.Y ¿para que? para que en 4 meses esté de mano en mano, sacándolo de casa a las 6 de la mañana, con el fin de que sus progenitores, compradores o clonadores puedan ir a ganarse la vida para sustentar el estatus social que quieren para ellos y para esa personita, a la que nadie le ha preguntado que es lo que ella desea. Y a partir de ya, carreras al médico, carreras a la guardería, carreras a la compra, carreras a casa de los abuelos, carreras a limpiar y ya no digamos adquisición de libros eróticos para poder follar, porque la vida de pareja se está consumiendo entre tantas idas y venidas.
Pues la verdad yo hasta aquí, no le veo nada de maravilloso a la vida que nos puede "regalar" algo tan hermoso.
Creo que tenemos mal planteadas nuestras prioridades, así que yo de momento me abstengo de tales regalos, porque creo que tener un hijo, si es que cuando llegue el momento esté preparada para ello, es algo muy muy importante, pues el futuro de nuestra estabilidad emocional, depende de lo que nos propongamos en la actualidad.
Hay padres que no deberían tener hijos porque no están preparados ni para tener un cachorro, y eso lo sufren los que comparten su entorno, y en cambio hay otros que están mucho mas preparados pero la vida tan maravillosa no les ha premiado con el hecho de poder concebir por vías naturales un hijo, y no por eso la vida deja de ser maravillosa para estas personas. Sería mejor si nuestras palabras estuvieran enlazadas con alguna neurona cuando las dejamos caer en twitter.
Realmente ¿esto es lo que determina si la vida es maravillosa? pues yo diría que no. La vida es maravillosa por sí sola, porque cada día nos da la oportunidad de sentirnos dueños de nuestros actos, del bien y del mal, dejar que sea el libre albedrío el que rija nuestro comportamiento y que al final del día podamos hacer lectura de si ha merecido la pena o ha sido otra "cagada".
PD
Solo la capacidad y voluntad de ayudar a los demás, es lo que realmente indica que la vida puede ser maravillosa al ofrecernos con cada día la oportunidad de sentirnos útiles y necesarios.
