Déco

Déco

viernes, 18 de mayo de 2012

Horus, hijo de Osiris




Extraña mañana, extraño día, entre tanto camina descalza por el dormitorio, buscando algo ....... buscando sus pensamientos, en donde se hallan? interferencias leves, aun quieren aparecer, pero no se permite la entrada a la mentira y al deshonor. Suena una melodía que la transporta y  abraza con fuerza, a la vez que repite constantemente: .... siempre, siempre contigo, jamás me separaré de tu cintura, mirame niña estos son tus ojos y mis pensamientos son los que te arrullan ........

Vivimos una época de cambios de todo tipo, nuestro sistema social ha de modificarse para adaptarlo a la  forma de vida que existe en este momento, está anticuado, han de imponerse nuevas licenciaturas, nuevos puestos de trabajo, otras formas de adquisición, y otros productos. Hasta que no realicemos los cambios necesarios para adaptarnos al nuevo mercado, seguiremos atascados y poniendo pasta del contribuyente a disposición de los especuladores.

¡¡Carnaza para las bestias, eso es lo que somos!! Este país,  socialmente hablando se ha vuelto un estado faraónico del Antiguo Egipto, lo que ocurre es que allí solo cabía un único faraón y aquí hay varios de distinto escalafón, claro está, y cada uno con su séquito, y ahí estamos nosotros los sufridores  rompiendonos la espalda para los descendientes del Dios Ra, que no tienen suficiente con el látigo y  luego van y nos chupan la sangre como vulgares sanguijuelas.

Vuelve la mirada hacia la cama vacía, y sucumbe a sus encantos, es la hora, yo te esperaré como cada noche y  juntos atravesaremos el mundo de los sueños a lomos de la estrella fugaz...... por que es aquí donde eres mío y nadie lo puede cambiar, mi cuerpo huele a ti .....


PD
Los cambios son inevitables, nuestro mundo está en constante evoluciòn y nosotros con él. Adaptarse o morir, ¡¡he ahí la cuestión!!