Un buen día para recordar, para sentir y para compartir!!
Niños con los días contados, sueños limitados donde un desenlace trágico es inevitable, un porcentaje en una estadística que tiene nombres apellidos e ilusiones..... padres rotos por el dolor, llenos de esperanza que cultivan cada hora mirando para la preciosa carita llena de alegría que les observa con atención esperando encuentren la solución para quitarles ese malestar, pero su expresión está muerta aunque luchan por alegrar esos momentos al lado de su tesoro.
Que difícil se hace la vida, cuando vemos que una parte de nosotros se va rompiendo, que cada día que pasa nuestro corazón se va desgarrando, y no hay consuelo en nuestro interior, solo el tiempo al lado de nuestro pequeño postrado en esa cama rodeada de artilugios que ni si quiera conocíamos hasta ese momento, todos nuestros sueños se han ido cayendo, y nosotros no encontramos donde apoyarnos para levantarnos, nuestra vida de pareja ya no cuenta, nos unimos ante el dolor, pero nos separamos en nuestra intimidad, que importa nada, solo el ¿por qué nosotros?, ¿por qué nuestro pequeño? hasta ese momento eramos una familia tranquila sin altibajos, como la mayoría de las parejas, pero un día algo cambió y ya nunca volvió a ser igual, hemos conocido una faceta de la vida que no sabíamos que podía llegar a tocarnos, que en ocasiones escuchamos hablar de ella, pero que se veía lejos, aunque parece ser que estába mas cerca de lo que sospechábamos.
Triste tristes momentos los de esta etapa, cada día la ilusión se desvanece, solo encontramos el consuelo en su mirada que deseamos perpetuar en nuestra retina como grabada a fuego, nos alternamos para separarnos de esa cama, que alberga nuestro tesoro mas preciado, deseamos acompañar a esta criatura en su viaje de regreso, y no pensar en una vida sin él, nos sumimos en un llanto sin fín cuando llegamos a nuestro solitario hogar, ahogamos nuestros gritos en el fondo del alma, con el fín de que no desgarren nuestra mente.
Nuestra vida sería mas sencilla si se terminara en ese momento, y no el calvario que nos tocará soportar, llegar a casa y ver la puerta entreabierta de su dormitorio, las fotografías de buenos momentos, aquellos juguetes que tan feliz le hicieron, su olor en la ropita, aquel sillón en el que lo mecía entre mis brazos, mientras le daba de mamar, aquellas horas mirando su carita mientras le arrullaba entre mis brazos, la paz que compartíamos que ya no volvería a repetirse, mi vida se ha ido ya hace muchos meses y no volverá jamás.
Este post se lo dedico a tantas madres que rotas por el dolor, sobreviven a duras penas.
PD.
Hoy es un día como otro cualquiera, conciencèmonos de que nuestros pequeños también sufren el cancer, pero algún día tendrá cura al igual que la gripe o la polio, sigamos luchando por que se continúe investigando sobre estas "enfermedades raras"
